ZAINTZEA DA ZAINTZEA // CUIDARSE ES CUIDAR
¿Alguien se ha preguntado si cuando nos cuidamos estamos cuidando a la comunidad o si cuando cuido a otro me estoy cuidando a mi mism@?
Cuidar, en el sentido amplio de la palabra no solo significa el extremo de cuidarte en la enfermedad o a alguien enfermo, sino cuidar de las relaciones, de no crear sufrimiento, de no absorber el mal rollo, en definitiva cuidarse-cuidar podría ser mantener una presencia impecable para contigo y los otros.
Dicha presencia implica tener la sensibilidad suficiente para sentir los cambios en tu cuerpo, adquirir la capacidad de observar nuestra mente y volverla eficaz, y finalmente poder conectar con nuestra esencia, esa que nos conecta con la verdadera naturaleza humana, con la consciencia.
Se habla mucho de “felicidad” y parece ser una aspiración impuesta. Mucha publicidad nos convence de que expande nuestras capacidades y nos hace mejores. Por otro lado la tristeza no nos inyecta energía para la acción, nos sume en una cierta inactividad y contra ese miedo juega con éxito el concepto de felicidad millenial. Sin embargo se ha demostrado que en la tristeza nuestros sentidos se potencian y es una fuente de creatividad al recurrir a caminos diferentes. Por eso después de una crisis suele venir una etapa de desarrollo, también personal. Todo reside en nuestro interior, se trata de observar, asumir y actuar conforme a tu decisión personal.
En Baraka, como formadores de la atención consciente (Mindfulness) entrenamos esa atención que convierte en eficaz y en real el movimiento constante de tus pensamientos, emociones y acciones. Con la atención al cuerpo, a la mente y a la consciencia podemos desarrollar una forma de vida acorde con nuestra naturaleza de seres de conciencia y evolucionar como tales.
En esta ocasión el programa CUIDA2 significa nuestra implicación con el mundo sanitario en tiempo de pandemia.
¿Aportar o silenciar? ¿Somos solidarios con lo que nos toca vivir?
Enrike Sorzabalbere